El principal objetivo de la quiropráctica es aportar a tu organismo, de una forma natural, saludable y no invasiva, las herramientas que necesita para que su sanación venga desde dentro. Sabemos que esta capacidad de sanación (nuestro Doctor Interno) se ve potenciado o debilitado en función de nuestros hábitos. Existen un sinfín de herramientas a través de las que sumamos o restamos calidad a nuestra vida, dependiendo del uso que hagamos de ellas.
Estas herramientas conforman el triángulo de la salud quiropráctico y se basan, principalmente, en 3 factores:
Factor químico
Factor mental
Factor físico
Todo aquello que introducimos en nuestro cuerpo interfiere en nuestra salud.
Nuestros pensamientos, conscientes o inconscientes, generan torrentes eléctricos en el cerebro que se distribuyen a lo largo y ancho de nuestro organismo a través de nuestro sistema nervioso. Aquello que pensamos, pues, afecta de forma directa a todo nuestro cuerpo.
El estrés sostenido en el tiempo debilita el sistema inmunitario. La tensión mental se refleja rápidamente en nuestro cuerpo, en forma de tensiones musculares que acaban en dolor.
La quiropráctica ayuda a equilibrar la respuesta de tu sistema nervioso autónomo, especialmente del sistema nervioso simpático.
Estos 3 factores se interrelacionan e influencian entre sí. Nuestro objetivo en Barcelona Quiropractic es el de ayudarte a recuperar o a mantener tu estado óptimo de bienestar. Así que, además del cuidado quiropráctico, te daremos consejos y asesoramiento acerca de aquellos temas de salud que están a nuestro alcance.
Solo tienes una vida, sácale el máximo partido con la quiropráctica.
